Luz Marina: nuestra comodidad más importante que la vida de nuestro tercer hijo

Es más fácil aceptar la voluntad de Dios que aceptar tu propio crimen...

Desde un principio supe de alguna manera que en Dios  era mi única esperanza pero cómo podía volver a Él después de lo que había hecho Dios es maravilloso y puso en mi camino un sacerdote que me recordó el Dios misericordioso de que yo me había alejado y me había olvidado[...]
 
Etiquetas: