Por el Padre Shenan J. Boquet – presidente de Vida Humana Internacional. Publicado el 14 de noviembre de 2023.
El martes pasado, los votantes de Ohio votaron 57% a favor y un 43% en contra para agregar el “derecho” al aborto a la Constitución estatal. Lo que esto significa es que en Ohio el aborto ahora está permitido sin restricciones hasta el punto de viabilidad.
Trágicamente, la aprobación de esta enmienda hace que sea casi seguro que la prohibición del aborto de seis semanas en Ohio, promulgada por el gobernador Mike DeWine (Republicano) en 2019, no entrará en vigor.
En el momento de esta votación más reciente, la ley estaba estancada en los tribunales. Pero dada la derogación de Roe el año pasado, tenía buenas posibilidades de resistir el escrutinio judicial. Desgraciadamente, aquellos niños que habrían estado protegidos por esta ley están ahora a merced de los abortistas.
Naturalmente, nuestro presidente “católico” respondió rápidamente a este horrible voto con una declaración alabando el aborto legal. “Esta noche”, afirmó el presidente Biden, “los estadounidenses votaron una vez más para proteger sus libertades fundamentales y ganó la democracia.
En Ohio, los votantes protegieron el acceso a la salud reproductiva en la constitución de su estado”.
No es solo una tendencia, es una llamada de atención.
Si bien el resultado de la votación de Ohio no fue del todo inesperado, no hay duda de que es un duro golpe. Niños reales morirán por esto. Muchos de ellos. Ésa es la cruda realidad. Esos son los riesgos involucrados en esta lucha.
Algunos activistas provida esperaban que ganara el bando provida. Después de todo, en 2020, Donald Trump ganó Ohio con el 53,18% de los votos. En general, los votantes de Trump tienen muchas más probabilidades de ser provida que los votantes de Biden.
Sin embargo, por alguna razón, ese 53% de los votantes no acudió a las urnas para votar por la vida, cuando el derecho a la vida del niño no nacido estaba explícitamente en la boleta. Eso es más que decepcionante.
Muchos comentaristas de los medios están llegando a la conclusión de que esta votación en Ohio muestra que el aborto es un tema perdido para los políticos republicanos. Argumentan que esta última votación es sólo la última de una serie de derrotas de la causa provida en las urnas, lo que “prueba” que el pueblo estadounidense no tiene apetito por la prohibición del aborto.
Si el Partido Republicano quiere ganar en el futuro, dicen, debe centrarse en otras cuestiones más “populares”.
Esto es basura. En primer lugar, está claro que el movimiento proaborto está dedicando enormes recursos a crear esta impresión de un movimiento aplastante a su favor. Es decir, están tratando de “fabricar consenso” para tratar de desalentar la causa provida y revertir el impulso.
A raíz de esta votación, los provida de Ohio señalaron que habían gastado muchísimo más. Como declaró el grupo provida Protect Women Ohio después de la votación:
“Sabemos que la ley conocida como Número Uno no representa los valores de Ohio. Se necesitaron 35 millones de dólares en financiación de fuera del estado y anuncios llenos de miedo y engaño para impulsar la agenda abortista más radical del país. Una agenda que consolidará el aborto tardío en nuestra Constitución despojará a los padres de sus derechos y eliminará las protecciones de salud y seguridad de las mujeres. Este no es el estilo de Ohio y estamos unidos en nuestra lucha contra estas políticas extremas”.
En última instancia, el lado provida fue sobrepasado por el lado proaborto gastó más de doce millones durante la campaña, y gran parte de ese dinero provino de otros estados, de grupos activistas proaborto bien financiados por multimillonarios.
Además, sabemos por experiencia que en una democracia suele haber un “efecto péndulo”. Es decir, cuando un lado del espectro político obtiene una victoria significativa, el otro lado del problema a menudo se ve impulsado a renovar sus esfuerzos.
Mientras tanto, el bando que acaba de ganar se vuelve complaciente y piensa que ya no tiene que trabajar tan duro para mantener su impulso.
Los provida trabajaron para derrocar a Roe durante cincuenta años. La muerte de Roe el año pasado es una de las victorias más significativas en la historia del movimiento provida. En cierto modo, no sorprende que el lado proaborto esté empezando a ponerse manos a la obra.
Muchos activistas proaborto se han dado cuenta del hecho de que su precioso “derecho al aborto” en realidad está siendo amenazado en muchos estados. De hecho, en muchos casos ha desaparecido y ha sido reemplazado por el derecho a la vida de nuestros hermanos y hermanas por nacer.
Sin embargo, esta última derrota en las urnas debe ser una llamada de atención para nosotros. Los provida que han estado en la lucha durante suficiente tiempo siempre supieron que derrocar a Roe era sólo el comienzo de la lucha para poner fin al aborto en Estados Unidos: un paso enormemente importante, pero no el final.
Pero ahora que los activistas a favor del aborto están indignados por nuestros recientes éxitos, debemos intensificar nuestro juego para igualar y superar su nivel de determinación y esfuerzo.
Si alguno de nosotros ha caído en la complacencia, asumiendo que sin Roe todo sería viento en popa, ¡ahora es el momento de sacudirnos el sueño, arremangarnos y ponernos a trabajar!
Esta lucha nunca terminará mientras vivamos. No podemos dormirnos en los laureles. Sólo existe el esfuerzo diario para llevar a cabo la voluntad de Dios y luchar para proteger a los vulnerables.
Los obispos de Ohio instan a la esperanza y la acción.
La Iglesia Católica en Ohio jugó un papel importante en la lucha para oponerse a la ley denominada como Número Uno. Según el Cincinnati Enquirer, la Iglesia Católica gastó al menos 1,7 millones de dólares para apoyar la lucha provida.
En una declaración después de la votación, los obispos de Ohio expresaron su consternación por el resultado y, sin embargo, instaron a los fieles provida a no desanimarse.
“Hoy es un día trágico para las mujeres, los niños y las familias en Ohio”, dijeron los obispos una vez que los resultados de la votación quedaron claros. “Lamentamos que la dignidad de la vida humana siga oculta por la duplicidad de una cultura de la muerte”.
Y, sin embargo, agregaron: “Aunque este es un día de tristeza, nunca nos falta esperanza.
San Pablo nos dice que fue en la esperanza que fuimos salvos y, si esperamos lo que no vemos, con paciencia aguardamos”.
Los obispos prometieron que, a pesar del revés, la Iglesia Católica en Ohio continuaría defendiendo a los niños por nacer y abogando por la familia y las mujeres.
“Mientras oramos por la conversión de mentes y corazones al evangelio de la vida, volvemos a comprometernos a defender a los niños en el útero y a apoyar a las mujeres necesitadas”, escribieron.
“La Iglesia Católica y sus fieles nunca se cansarán de nuestra misión de ayudar a las mujeres y las familias a prosperar a través de ministerios como Walking with Moms in Need (Caminando con las mamas con necesidad) y otras organizaciones locales que brindan apoyo material y espiritual y mediante la promoción ante los formuladores de políticas”.
Los obispos agradecieron a todos aquellos activistas provida que habían invertido su dinero, tiempo y oraciones en defender a los más vulnerables entre nosotros.
“Vuestros sacrificios demuestran que la Iglesia nunca abandonará su misión de apoyar la vida humana”, dijeron. “Perseveraremos en esta misión hasta que cada niño por nacer esté protegido, cada mujer embarazada reciba apoyo y cada vida humana reciba respeto, dignidad y justicia”.
El mensaje de determinación, esperanza y nuevo compromiso de los obispos con la causa es precisamente lo que se necesita en este momento oscuro.
La victoria es nuestra.
Sin embargo, incluso mientras nos quitamos el polvo y volvemos a comprometernos a realizar un esfuerzo concentrado e incansable en defensa de los niños por nacer, también deberíamos tomarnos un momento para recordarnos que todas las burlas de los medios de comunicación a favor del aborto ni siquiera se basan en hechos.
Como se señaló anteriormente, los activistas y los medios de comunicación proaborto están intentando desesperadamente presentar la situación como una victoria “inevitable” de las fuerzas proaborto. Quieren convencernos de que la marea se ha vuelto definitivamente contra los provida. Quieren arrancarnos el corazón.
Es cierto que ha habido algunas pérdidas reales en los últimos meses. Y, sin embargo, como señala el analista provida Michael New en National Review, hay muchas razones para creer que el impulso está sólidamente del lado provida. No lo olvides: ¡Roe fue la ley del país durante cincuenta años! Y ahora ya no está. ¡Regocíjate en ese hecho!
Ningún provida inteligente pensó jamás que en el momento en que Roe desapareciera, el aborto terminaría en Estados Unidos o que la lucha terminaría. Por esta razón, es espantoso leer a un autor del National Catholic Reporter argumentando que la lección que se desprende de la última derrota de Ohio es que los provida deberían “abandonar” la esfera política. “Olvídate de cambiar las leyes. Trabaja para cambiar corazones”, escribe.
Una ridícula y falsa dicotomía.
Qué tontería derrotista. ¡Sí, por supuesto que debemos cambiar los corazones! Es por eso por lo que el movimiento provida ha volcado su corazón y alma en la fundación de organizaciones educativas y una gran cantidad de centros de embarazos en crisis para llegar a los corazones de las madres en riesgo. Y, sin embargo, la idea de que debemos elegir entre cambiar los corazones y las leyes se basa en una ridícula y falsa dicotomía.
No es una elección entre cambiar corazones y cambiar leyes. Después de todo, una de las formas claves de cambiar los corazones es cambiar las leyes. Las leyes enseñan y afirman los valores de una sociedad. Durante cincuenta años, los valores de nuestra sociedad, los corazones y las mentes de nuestros ciudadanos, fueron moldeados por el injusto marco legal de Roe.
Todo eso ha cambiado.
Además, como señala Michael New, gracias a la revocación de Roe, hemos visto avances significativos y concretos. Catorce estados tienen ahora leyes que prohíben todos los abortos. Y después de que se derogó Roe, otros siete estados aprobaron fuertes leyes provida que protegen a una porción significativa de los niños por nacer. Nada de esto hubiera sido posible sin la derogación de Roe. En respuesta a la victoria masiva de la derogación de Roe, podemos esperar una reacción violenta. Pero en lugar de ceder al desánimo, debemos utilizar la ferocidad de esa reacción para impulsarnos a renovar el esfuerzo, no para rendirnos y lamentarnos del hecho de que “nunca” podremos ganar en las urnas.
Sí, debemos seguir educando corazones y mentes, y debemos seguir aprobando leyes que tengan el efecto de salvar a niños reales hoy en día. Roe tuvo que irse. Podría decirse que fue la decisión más atroz de la Corte Suprema de Estados Unidos en la historia de Estados Unidos.
Fue fundamental y profundamente injusto. Codificó la discriminación sistémica contra los más inocentes y débiles entre nosotros. La derogación de Roe fue una victoria magnífica. No escuchemos ni por un minuto las burlas y abucheos de los periodistas y activistas pro-aborto que desean desanimarnos con argumentos tendenciosos que sugieren que derogar Roe de alguna manera ha empeorado las cosas.
Ahora no es el momento de desanimarse. Ahora es el momento de renovar los esfuerzos. Para la oración. Por la esperanza. Después de todo, la victoria es de Dios, no nuestra. Ponemos toda nuestra esperanza en Él y nos ponemos a trabajar como guerreros felices que descansan confiados en el conocimiento de que su Señor es el Señor de todo, con el poder de cambiar el rumbo en un instante.
Aclaración: Como siempre hacemos cuando abordamos el tema del aborto, queremos dejar bien claro que Vida Humana Internacional y el auténtico movimiento provida no estamos aquí para condenar a la mujer ni a nadie más que de una manera u otra se han involucrado en un aborto. Estamos aquí para condenar el aborto, no a las personas. A las personas que han caído en este grave pecado las urgimos a un tener un sincero arrepentimiento y a reconciliarse con Dios a través del hermoso y siempre imprescindible Sacramento de la Confesión, donde Jesús les espera con los brazos abiertos para derramar sobre ustedes su infinito Amor y Misericordia. La Iglesia también cuenta con ministerios de reconciliación y sanación post aborto. Que nadie pierda la esperanza de encontrar el perdón y la sanación de Dios. Recomendamos a todos el no. 99 de esta misma Encíclica de San Juan Pablo II, Evangelium Vitae, donde el Santo Padre aborda este tema de la reconciliación con Dios y Su sanación para estas personas. |
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